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Como un aire de ilusión



Obra de teatro de un solo acto y una sola escena


Personajes:


MARITA

VICTORIO


(Interior de una casilla rodante o humilde vivienda proletaria. Una mesa parada sobre cuatro ladrillos, platos y ollas sucias sobre la misma, un enorme bidón en el piso. Dos banquitos de madera despintados, un colchón decilachado con sábanas revueltas, al lado, una garrafa de diez quilos, enchufada a una suerte de anafe. En la pared de la casilla, de fondo la imagen de Gauchito Gil y un poster en blanco y negro con la imagen de ese gran trapecista Mexicano, que fuera Alfredo Codona. En el suelo latones de leche nido, utilizados como macetas con algunas plantas que intentan alegrar el lugar. La planta de la moneda y un helecho serrucho caen durmiendo sobre la puerta. Hay algunas botellas de dama juana que se encuentran vacías en un rincón. En otro rincón, un viejo cartel herrumbrado que reza con letras fileteadas en un amarillo melancolico: ¨Circo Rodas¨. Abajo una imagen de tres elefantes haciendo equilibrio, parados los tres sobre el fino cordón de un trapecio en el aire. Hacia uno de los costados, una puerta que da hacia un baldío, esa puerta, apenas tiene un mantel viejo, todo rotoso, utilizado como cortina. VICTORIO un hombre de 58 años, aproximadamente. Esta vestido con malla de trapecista, el traje le queda bastante ajustado, de tal manera, que ridículamente se deja ver la enorme panza que cae debajo de la remera. El conjunto es de color azul, en el pecho una estrella plateada y brillosa, vendas blancas, percudidas en ambas muñecas, cinturón plateado con brillantina, zapatillas grises que alguna vez fueron blancas y una toalla vieja que le cuelga del cuello. VICTORIO levanta unas pesitas caceras, hechas con palo de escoba y tarros de leche nido, rellenados improlijamente con cemento. Se siente que golpean las manos afuera, VICTORIO deja las pesitas en la silla, agarra un espejo que está sobre la mesa, se peina brutamente con la mano y va hasta la puerta que da al baldío. En ese lugar, se encuentra con su ex esposa, MARITA. Una mujer de 40 años, aproximadamente. Ella viste con un jeans viejo, zapatillas gastadas, una campera negra de cuero, trae consigo una mochila infantil. Los dos ingresan a la casilla)

VICTORIO: Pasa Marita, pasa… disculpá el quilombete que tengo acá, no… no tuve tiempo ni de pasar los pisos… (alcanzando un banquito) sentate Marita… sentate…

MARITA: Está bien así Victorio, está bien…

VICTORIO: ¿Queres tomar algo? te sirvo un vasito de gaseosa…

MARITA: No, te agradezco Victorio, recién merendamos en casa…

VICTORIO: (Que se lo ve ansioso) ¿El Dieguito… está afuera?

MARITA: Si, se quedó ahí afuera jugando con el poni… ¿queres que lo llame?

VICTORIO: No, dejalo… para que lo vas a… a… (al ver que MARITA se lo queda mirando) ¿qué te parece la pilcha, eh? ¿te acordas de este trajecito vos no?

MARITA: Si, me acuerdo… hacía tiempo que no te lo veía puesto nomás…

VICTORIO: (Entusiasmado con una sonrisa, feliz) Estoy a full Marita, estoy a full… colgué la cadena del sauce y ahí me pongo dos horas todos los días… no me quiero dejar estar, me quiero ir de vuelta, al Rodas me quiero ir… si no voy enrolado en el trapecio, ya dije, primera fila en el péndulo humano…

MARITA: (Mirando el tremendo desorden que hay en el piso) Que bueno, ojalá que te llamen…

VICTORIO: (Se echa talco en las manos sonriente) Yo por las dudas me entreno para los dos, si no es con uno, es con el otro seguro… además que cuando vean de lo que… de lo que soy capaz de hacer allá arriba… eh… ¿sabes qué no? le hago triple salto mortal tipo Alfredo Codona y… y… y se van a quedar boquiabiertos, mudo se van a quedar…

MARITA: (Por el bidón tamaño baño que está sobre la mesa) ¿Y este bidón?

VICTORIO: Eh… ah, lo uso para… para como es… para… para querosén lo uso… compré una estufa a querosén Marita, que no sabes… calienta que es una maravilla… la de cuarzo me come toda la batería del gordini… es una… es una porquería… así que la tuve que fletar nomás…

MARITA: (VICTORIO retoma el ejercicio con las pesitas) Quemale bien la mecha nomás, que si no después te larga un oloraso que Dios me libre…

VICTORIO: (Contento mira hacia afuera mientras hace ejercicio) El Dieguito siempre en el poni eh, lo veía pastar el otro día y me acordaba… está grande el Dieguito eh…

MARITA: (Mirando hacia afuera) Lo que está comiendo bien, ahora está pegando el estirón…

VICTORIO: (Idem) Se nota, eh… si se nota… yo también estoy comiendo como loco… pero ahora estoy cuidando la línea, le estoy dando a la dieta ahora, a los ejercicios le estoy dando… debes en cuando un asadito, milanesas con puré, no te digo… pero ojo el piojo que me mantengo en buen estado yo, eh, vos me ves así pero, pero… debes en cuando salgo a trotar, a mover todo el guiso salgo… más vale… (mostrando los músculos) mira ahora se me está endureciendo la… la como es…acá atrás se me está endureciendo, abajo de la pantorrilla de los tendones… se me está poniendo duro otra vez el músculo, lo que está recuperando vitalidad se ve…

MARITA: Si, seguro… se te ve muy bien…

VICTORIO: (La mira feliz) Estoy enchufado Marita, estoy enganchado, el otro día me fui al correo y le mandé carta al Rodas… (Corta el ejercicio, y se vuelve a echar talco en las manos) le puse, 58 pirulos, metro ochenta, buen estado físico y libreta sanitaria a disposición… por si las moscas la libreta… no sea que me la pidan y… (tentado) me faltaba ponerle pelo rubio, ojos azules al mejor estilo Robert Redford… a ver si por ahí el guanaco de Tortosa agarra viaje y me manda a llamar…

MARITA: Y por ahí quien sabe… con un poco de suerte…

VICTORIO: Algo más que la suerte Marita… no se van a perder un tipo experimentado… veinticinco años haciendo firuletes ahí arriba, eh, veinticinco años no es moco de pavo… (retoma el ejercicio) el Keko me dijo el otro día, veinteañeros todos los trapecistas, pero a vos te toman seguro Victorio, vos entras de cajón, más vale, un gallo duro entre tantos gallitos de porra nunca está de más…

MARITA: (Gritando hacia afuera) Cuidado Dieguito no le tires de los pelos, le haces mal al animal…

VICTORIO: (Se ríe, mirando hacia afuera) Un cariñito que le hace…

MARITA: Bastante bruto con el cariñito…

VICTORIO: (Pausa breve) La… la que se acordaba de mí era la señora de la rotisería, mira vos, eh… ni bien asomé por la ventanita me reconoció… usted es el famoso trapecista del circo Rodas, así me dijo, te juro, me dejó helado… se acordaba hasta de los giros, de los trucos, de todo se acordaba… y mira que el Rodas la última vez que pasó por acá fue hace una… fue hace una pila de años, una bocha fue… (sonríe) pero la cosa es que la doña me vio la caripela y ahí nomás que se acordó… si se acordó… (MARITA abre la tapa de una olla, y se echa hacia atrás) si hasta me hizo descuento y todo Marita, me hizo descuento, un fenómeno la señora…

MARITA: (Con cara de asco) ¿Todavía tenes este guiso Victorio?

VICTORIO: Eh… ah, es que por ahí… como es… se lo… se lo doy a los perros, Marita… anda un manto negro así de grandote que viene siempre de noche… anda perdido pobrecito, da lástima… hermoso perro, eh… viene y se pone ahí donde estas vos… y me mira así con los ojos grandes, saltones… me mira… parte el corazón verlo así de flaquito… yo todo lo que me sobra se lo doy él…

MARITA: (Mirando adentro de la olla) Pero esto está todo agusanado Victorio… me imagino que lo vas a tirar, es un asco esto…

VICTORIO: (Corta el ejercicio) Se lo dejo al manto negro Marita… para que lo voy a tirar si… si… el animal después come con unas ganas que no te digo… (mira hacia afuera, contento) El Dieguito está chocho arriba del poni, eh… uh, mira como le tira de las orejas, debe creer que el bicho es de goma… (gritando hacia afuera) che, aflojale con las orejas… no es el de la calesita Dieguito… (a MARITA) que bárbaro… encima que los dueños se lo quieren llevar ahora…

MARITA: ¿Al poni se lo quieren llevar?

VICTORIO: (Se sienta y se seca la cara con la toalla) Para sacar fotos, para los turistas, flor de negocio quieren hacer ahora con el animal, no le dan ni cinco de bolas y ahora se lo quieren llevar de primerísima figura…

MARITA: (Pausa breve) ¿Y con el Mariano Moreno, como te está yendo?

VICTORIO: Como la mona…

MARITA: ¿Por?

VICTORIO: (De una jarra toma agua) Ahora quieren que agarre el turno de Medina… les renunció en la cara hace como tres días y ahora quieren plantarme en el lugar de él…

MARITA: ¿Y? te van a pagar más…

VICTORIO: Ni a palo Marita, pagar nada… la cosa es por el mismo botón, por la misma moneda… con la diferencia que me quieren hacer laburar más horas, nada más…

MARITA: ¿Y porque no hablas con Olivarri? habla con él y pedile un aumento…

VICTORIO: (Pausa breve) Mira Marita, vos sos la única que lo sabe, a mí me pega el grito el Rodas y yo me voy como tiro, me importa un jorope, de cabeza me voy mira… (se levanta y se va hasta un rincón) que me cansé de andar como… como burro fregando los pisos del Mariano Moreno… me… me harté Marita… Un día me levanté de la cama y me dije basta… tiro todo a la mierda y… y… (se corta, pausa breve) yo quiero volver al Rodas, volver a estar en un circo Marita… sentir ese olor a viruta fresca que sale por debajo de las butacas, el olor a humedad que se desprende de la lona, de los caños, yo quiero volver a respirar todo eso Marita…

MARITA: (En una señal de aliento) Y bueno… por ahí a lo mejor, te llamen Victorio, quien dice que no…

VICTORIO: Me van a llamar, si… como no me van a llamar…

MARITA: Además Tortosa ya te conoce, el Rodas te conoce, bah…

VICTORIO: (Pensativo) Si, me… me conocen… son como de mí familia, bah… (pausa breve) pero al Rodas yo no me quiero volver solo Marita… no duraría una noche solo allá…

MARITA: ¿Y por qué vas a estar solo? esta Velazque, está el Keko, está Marquecini, están todos allá…

VICTORIO: Si pero yo me refiero a… a otro tipo de soledad Marita…

MARITA: (Pausa breve, agarra el mate que está en la mesa) Bueno, voy preparando el mate porque si no después…

VICTORIO: La yerba está en el cajoncito…

MARITA: (De un cajoncito saca una bolsa de yerba) Vamos hacer un rico mate… bien calentito y espumoso, eh… porque si no lo preparamos ahora, después se hace tarde y nos quedamos mirando el techo…

VICTORIO: (Pausa, la mira a MARITA que empieza a preparar el mate) Yo Marita… yo estaba pensando que… no sé… que a lo mejor…

MARITA: (Al ver que VICTORIO se queda callado) ¿Qué a lo mejor que?

VICTORIO: Nada, no… no me des bola, nada…

MARITA: Eh…

VICTORIO: Nada Marita… nada… no…

MARITA: (Lavando el mate en la palangana) Te conozco Victorio… ¿qué me queres decir?

VICTORIO: (Le cuesta) Que yo estaba pensando que… ustedes son mí única familia y… y… (la mira costosamente, luego retoma) nada… a mí me gustaría mucho que… que… (lo mira a DIEGUITO, luego la mira a MARITA) que me acompañen ustedes Marita…

MARITA: (Se lo queda mirando un tiempo con el mate en la mano) ¿Acompañarte a donde Victorio?

VICTORIO: Al Rodas Marita… los tres juntos digo… como una familia… (MARITA como si no lo hubiera escuchado, retoma la tarea en silencio, le pone yerba al mate) yo… yo quisiera volver… que volvamos… que volvamos a estar los tres juntos de nuevo… en el Rodas podemos empezar de vuelta, empezar de cero digo, los tres juntos otra vez, como eramos antes… probar de nuevo digo… ¿vos… vos que decís?

MARITA: (Deja de ponerle yerba al mate y lo mira) ¿Qué digo de qué?

VICTORIO: (Pausa breve) Y de eso… de… ¿a vos no te gustaría que… que vivamos los tres juntos de nuevo? (Pausa breve. MARITA indiferente, esta vez pone azúcar en elmate) mira que si es por el chico… yo ya lo estuve pensando, le enchufamos una profesora particular y listo… (MARITA se lo queda mirando) además ahora está eso del como es… del… del… del estudio a distanciamiento, eso, el chico ahora puede estudiar a distanciamiento, se toma un colectivo acá en la garita y…

MARITA: (Interrumpiéndolo bruscamente) Dejate de joder Victorio ¿qué estás diciendo? (pausa breve) que se te dio ahora por pensar que… que… nosotros hace como tres años que no vivimos juntos… desde que vinimos a vivir acá a la Laboulaye que nos vemos cada muerte de obispo… y si nos vemos la cara debes en cuando, es gracias al chico…

VICTORIO: Ahí está ves, ahí saltó el bicho, ves, ahí quería llegar yo… yo siempre pensé lo mismo, el mocaso fue venir acá… porque nosotros no nos tendríamos que haber bajado nunca del Rodas, jamás, ese… ese justamente fue el peor error… porque nosotros tendríamos que haber seguido viaje hasta coso, hasta… hasta la Pampa tendríamos que haber seguido viaje… pero vos insististe tanto con lo de tú vieja que… que…

MARITA: (Reacciona enojada cortándolo) ¿Perdón que tenes para decir de mí mamá, eh? ¿otra vez te la vas agarrar con ella? (pausa breve) gracias a ella que el Dieguito está como está… nos salvó las papas del fuego a nosotros mí vieja… porque acordate que nosotros llegamos a Laboulaye con un brazo adelante y el otro atrás, recordemos bien como fueron las cosas… la verdad de la milanesa es que si no hubiera sido por ella… mira no sé…

VICTORIO: Claro fue tú vieja ahora, yo… yo no moví ni un dedo por el chico, ni el sobaco moví, yo me rasqué las bolas durante esto tres años…

MARITA: Nadie está diciendo eso Victorio… pero no teníamos un peso partido por la mitad y el chico estaba en pésimas condiciones de salud… en cada pueblo una salita de emergencia o un hospital… ¿o vos no te acordas la que pasamos la última vez, eh? ¿vos no te acordas?

VICTORIO: (Pausa breve, mirando hacia afuera) Yo todos los días pienso lo mismo Marita… si de algo estoy convencido hasta acá, hasta las orejas, es que nosotros no nos tendríamos que haber bajado nunca del Rodas, nunca… bajamos y ahí fue que perdimos todo… hasta la dignidad perdimos… a nosotros mismos nos perdimos Marita…

MARITA: ¿Pero vos te pensas que el chico con el asma que tenía podía seguir en esa casilla Victorio? ¿te pensas que el chico podría haber sobrevivido a esos viajes largos y pesados que se mandaba Tortosa? Cada diez horas paraba en una estación de servicio, y si es que paraba. Se ve que vos te olvidaste cuando lo llevamos al Dieguito a ese hospital de Mina Clavero, que lo llevamos a los trotes, súper agitado lo llevamos al chico, ni siquiera mamá podía decir… la verdad que me sorprende que todavía me sigas discutiendo lo mismo Victorio…

VICTORIO: (Pausa breve, mira hacia afuera) Lo del asma cuando era criatura Marita, hace una pila de años lo del asma, digamos las cosas como son… pero ahora el chico es un… un ford T… un… que digo… un… un V8 es el chico… el chico está más sano que bebé recién nacido…

MARITA: (Cortante) El asma todavía lo tiene…

VICTORIO: (Pausa, se lleva el bidón a la pieza, luego vuelve y se sienta) Pero vos te pusiste a pensar Marita… la felicidad que tendría el Dieguito de vernos a los dos juntos… ¿te pusiste a pensar? además el chico necesita de su padre también… pero de tenerlo cerca digo yo… de… de verlo así todos los días… cara a cara digo… está en la edad de tener un como es… un coso… un referente masculino el chico…

MARITA: El chico está bien como está Victorio… te ve dos veces por semana y con eso suficiente, para que más…

VICTORIO: (Que se la queda mirando) Claro, para que más, total… (Pausa breve) si es por lo de estar juntos Marita… dormimos en casillas separadas si vos queres, vos en una y yo en la otra, hasta que nos acostumbremos, vos dormís con el chico claro, después de todo sos la madre…

MARITA: No es eso Victorio, no es eso… no se trata de dormir juntos o separados… digamos las cosas como son… nosotros siempre estuvimos así… a los ponchasos estuvimos… ¿qué te hace pensar que después de tres años vamos a estar mejor ahora, eh?

VICTORIO: (Pausa breve, mira hacia afuera pensativo) Con intentarlo no perdemos nada Marita, eh… además uno con intentarlo… puede… (no sabe como seguir y luego) la… la vida se va como una vuelta mortal… trompo y trompo y… cuando menos lo pensaste, paf… caíste parado… o… o… o caíste de culo y te reventaste la… la… la como es… la... la… la coso… la… la… la cabeza contra la pista que no es lo mismo, bah… (intentando ser más claro) bueno… lo que yo te quiero decir Marita en realidad es que…

MARITA: (Queriendo cortar con el tema) Está bien Victorio, está bien…

VICTORIO: (Pausa, los dos en silencio) ¿No… no íbamos a tomar unos mates nosotros? voy a poner la pavita… (pone la pava en el calentador y en la arpillera busca yuyos) tengo unos yuyito para el mate, espectaculares los yuyitos que tengo… peperina tengo… poleo… carqueja por ahí alguna ramita me debe quedar… (al ver que MARITA está tentada) ¿qué… que pasa?

MARITA: (Tentada) Nada…

VICTORIO: (Que no entiende porque se ríe) Eh…

MARITA: (Riéndose) Que todavía tenes la misma mancha de aceite en esa malla Victorio…

VICTORIO: (Se descubre la mancha en el pantalón y luego sonriendo) Ah sí, tenes razón…

MARITA: (Que sigue riéndose) Mira que pasaron los años y todavía tenes la misma mancha pegada por ese traje…

VICTORIO: (Mirando la mancha) La pucha que… que… y eso que le pase lavandina, detergente le pase, hasta lo lavé con acaroina y todo… y no sale, eh, la mancha inmutable, no se mueve de ahí… ahora capaz que lo lleve a la modista, a lo de la Pocha… lo tengo que hacerlo zurcir acá en la rodilla, ves… lo que se ha puesto viejo se estira y se raja todo, una lástima…

MARITA: Deja que te lo coso yo Victorio, pero te lo traigo el jueves recién, eh…

VICTORIO: (Que sigue mirándose la mancha en el pantalón) No Marita, que te vas a estar molestando vos que… que demasiado tenes con el Dieguito…

MARITA: No me molesta Victorio, si sabes… después te lo sacas y me lo das que me lo llevo a casa… (VICTORIO camina hacia a la puerta rengueando) ¿qué te pasa que caminas así?

VICTORIO: (Se agarra la cadera exageradamente) Eh… ah, no… me caí esta mañana… lo que heló anoche había mucho rocío en la cadena, estaba toda mojada… que, cuando fui agarrarla, paf… un jabón… pase de largo…

MARITA: Tenes que tener más cuidado Victorio… mira si te quebras una pierna… no tenes veinte años vos. eh…

VICTORIO: (Sentándose con dificultad) Ya sé Marita, ya se… la de golpes que he tenido yo… me venís a decir a mí… (pausa breve) ¿te acordas de la piña esa que… que tuve allá en la Carlota? ¿te acordas que volé como 24 metros afuera de la pista? ¿vos te acordas de eso?

MARITA: Si no me hagas acordar, la de nervios que tuvimos esa noche…

VICTORIO: Esa sí que fue una piña grande, eh… flor de tortazo, la red no sirvió para nada porque salí disparado hacia la… hacia la lona… y di de lleno con la cara en el primer banquito de la platea, vos te acordas, decí que no había nadie sentado ahí, que si no…

MARITA: Flor de tortilla si no…

VICTORIO: (Enumerando) Me quebré las dos costillas, la rótula izquierda, la cadera en dos partes, la clavícula y el tabique nasal que pegó acá, contra la rodilla pegó… además de tener doble fractura de cráneo, eh. Te acordas que… que los médicos te decían, que… que estuve como tres minutos muerto, que no me podían… como es… que no me podían reanimar… ja, pero me recuperé ahí nomás… y a los ocho meses el señor ya estaba colgado en el trapecio, firuleteando así, volando por los aires como un pajarito.

MARITA: Y vos todavía tenes ganas seguir arriesgando el cuero por ahí…

VICTORIO: Mientras tenga una esposa que me cuide y un hijo que me quiera… muero feliz y con las botas puestas… más vale… (pausa breve. MARITA mira hacia afuera) Yo cambié Marita, ya no me sarpo más con… con el alcohol, eh… yo cambié… ahora soy un duque… un señorito soy… un señorito ingles… (MARITA lo mira) de en serio te digo, abrí la heladera y fijate… solamente coca cola y sprite… ni una gota de alcohol vas a encontrar, eh… ni siquiera alcohol etílico tengo… (yendo hacia la conservadora) de en serio Marita, fijate… abrí la heladera y fijate…

MARITA: Está bien Victorio, está bien, a mí ya no me tenes que dar explicaciones, esas son cosas tuyas…

VICTORIO: (Se sienta de nuevo) No bueno, pero te lo cuento para que... para que veas que… que hice un como es… un… un cambio de actitud… un cambio profundo hice… (agarra una botella de cerveza que estaba sobre la mesa y la esconde por debajo) además con la dieta exigida para bajar la busarda… no te como ni arroz con leche, con eso te digo todo… hasta el faso estoy dejando… (pegando arañazos en el aire) araño así hasta las paredes pero no te prendo ni una coliya, eh, pero ni una sola, eh…

MARITA: (Le alcanza el mate) Toma el mate Victorio, guarda que está caliente, eh…

VICTORIO: (Pausa breve, MARITA mira hacia afuera) Ahora están pagando mejor Marita… en el Rodas están pagando muy bien, eh… me lo dijo el keko por teléfono… debes en cuando nos hablamos ¿te acordas de keko? Todavía sigue con el mismo numerito del caniche y el pekinés… no te cansas de currar con el mismo baile le dije, se reía… si fue el keko que me dijo que me presente… me tienen muy bien conceptuado allá, me dijo… si te llaman Victorio vas a tener un sueldaso tipo gerente de banco, así me dijo, te juro… ahora en el Rodas pagan como los Dioses… y… y… guarda, eh… no cualquier chirola… guarda que ahora garpan muy bien allá… platita en mano y todo, eh… efectivo caché… más vale… (pausa breve, un chupón al mate) imaginate Marita, yo estoy cumpliendo mi sueño… yo estoy cumpliendo… hacer trompos en el aire a los 58 pirulos, no es poca cosa… yo siempre digo, mientras el mecanismo no me falle… lo único que me falta es completar el como es… el coso… el… el aspecto… sentimental… eso… el aspecto…

MARITA: (Para evadir) Ah, me olvidaba…

VICTORIO: ¿Qué cosa?

MARITA: Te traje un poco de pasta flora…

VICTORIO: (Contento, sus ojos iluminados) ¿De… de en serio? ¿para mí?

MARITA: (Saca un taper de la cartera) La hice esta mañana para el cumple del Santi… se me fue un poquito la mano en el membrillo nomás, pero… igual está comible, eh…

VICTORIO: (Abre el taper y saca un pedazo contento) Uy pero que bueno, con lo que me gusta la pastaflora… (se frota las manos) me acuerdo que en el Rodas todos los domingos te hacías una de esta… mate cosido de por medio y… y los atracones que nos… que nos habremos pegado con pasta flora… con Velázquez no la comíamos… la devorábamos… ni las migas dejábamos con aquel otro… hace de cuenta que pasaba la langosta con Velazque… (prueba la pasta flora) está riquísima Marita, eh… está mundial…

MARITA: (Asiente con la cabeza) Lo único que ahora rompiste con la dieta…

VICTORIO: (Comiendo con la boca llena) Que se cague la dieta… una pasta flora como esta, no se… no se come todos los días… más vale… sagrada tu pasta flora Marita…

MARITA: Bueno, tampoco para tanto…

VICTORIO: (Pausa breve, mientras come pensativo) Decí que por lo menos, la costumbre no la perdimos ¿no?

MARITA: (Lo mira) ¿Qué costumbre?

VICTORIO: (Mirándola, luego semi sonriente) Y la de tomar mate y comer pastaflora los domingos Marita…

MARITA: (Pausa breve, pensativa) Ah, sí, seguro…

VICTORIO: (Pausa breve, queda pensativo mientras come) Vos eras buena contorsionista Marita, eh… igual que tú vieja… te sabias estirar bien… te sabias… tenias como es que se dice… ductilidad tenias… lástima te hallas dejado estar no… ¿te acordas como te presentaba Tortosa? (imitando a TORTOSA) Con nosotros la chica bazoka… la chica de goma… la contorsionista oriental… (se ríe) se mandaba cada título aquel otro para, para… y con musiquita de fondo y todo te presentaban a vos eh, guarda… en cambio a mí… a mí ni me presentaban… a mí me ponía los tambores eso de cortina y a la mierda…

MARITA: (Gritando hacia afuera) No te vayas tan lejos Dieguito, tene cuidado con ese animal…

VICTORIO: (Pensativo) Pero siempre terminaba el acto mío y… vos me esperabas con la toallita mondongo… en el camarín me esperabas, siempre… ¿te acordas? (MARITA sigue mirando hacia afuera) yo me… me sacaba toda la ropita y… y vos me secabas todo el cuerpito… pieza por pieza me secabas… hasta el pelo me secabas… (MARITA le da la espalda) después me lavabas la cabeza en el fuentón… me ponías ese shampo… el como es… el… el… ese que era todo amarillo… el grandote… el…

MARITA: Johnson…

VICTORIO: Ese, ese mismo… el Don Johnson… era rico ese… ahora me compré uno en el mercadito… uno parecido… pero es otra… como es… otra… otra marca es… (queda pensativo un tiempo, luego sonriente) El primer beso que nos dimos fue en Villa de Soto… los dos encerrados en el globo de la muerte me acuerdo… (MARITA lo mira feo) había terminado la función y se nos dio por meternos ahí… pecado de juventud, llovía esa noche… uf, a cántaros llovía… (pícaro, teatral y con tonito juguetón) después una manito por acá, otra por allá… vos que te reías… te matabas de la risa… no parabas de reírte un segundo que…

MARITA: (Se levanta interrumpiendo el recuerdo y gritando hacia afuera) No le tires más de las orejas Dieguito, lo vas a cansar al animal así…

VICTORIO: (Se levanta de la silla, montado en el recuerdo) Y esa misma madrugada que salimos a… a dar vueltas en la ciambreta por Villa de Soto… que vos me agarrabas, me abrazabas tan fuerte que yo en un momento te tuve que…

MARITA: (Interrumpiéndolo rápidamente) A las seis me voy Victorio…

VICTORIO: (Pausa prolongada, se vuelve a sentar, queda pensativo un tiempo) Mira si tendremos años juntos Marita, eh… nosotros nos pusimos de novio cuando debuté en el trapecio sencillo… a los 15 pirulines debuté… a los 28 ya era trapecista hecho y derecho… (pausa breve) un día que me agarren loco me presento al mundial de trapecistas le dije a Marquecini… el día que haga triple salto mortal ahí arriba, sin telaraña… ahí sí que la pista me va a quedar chica, me consagro… arriba te hago hasta la escarapela le dije, se reía Marquecini… (Pausa breve, MARITA mira hacia afuera) pero al que le fue bien con el trapecio fue al loco Viglia… también como volaba aquel otro… como para no tener un az de oro bajo la manga… (como si lo viera) el tipo girando y girando ahí arriba como una noria, no me lo olvido en la vida de Dios… del circo criollo, al show viajero del Palace de Mónaco… imparable el loco Viglia, imparable… se como es, se… se internacionalizó… y no volvió más… y lo bien que hizo te digo, eh… lo bien que hizo… (pausa breve, mira hacia afuera, luego la mira a MARITA) mira si a mí me pasa como al loco Viglia… un representante que me vea una noche en el Rodas y… guarda, eh… trapecista de 58 pirulo no se ve en todos los circos… guarda… me toman del internacional de Rusia y… y me vuelvo importado… figurita internacional me vuelvo… ¿sabes qué no?

MARITA: No digas pavadas Victorio…

VICTORIO: ¿Y porque no? un golpe de suerte lo tiene cualquiera… uno nunca sabe… les hago la gran Codona ahí arriba y… y se quedan todos locos… turulecos quedan… me los meto en el bolcillo en una patada… más vale…

MARITA: (Abre una olla y pone una porción de pasta flora) Te dejo pasta flora acá en esta olla Victorio…

VICTORIO: Gracias Marita… con una porción va está bien, eh…

MARITA: Pero comela, eh… que si no después se te va agusanar toda y se te va a podrir…

VICTORIO: (Pausa breve, mira hacia afuera sonriendo) Una postal el Dieguito arriba del poni eh, una postal…

MARITA: (Mirando hacia afuera) Va a llorar a gritos cuando se lo lleven…

VICTORIO: El Dieguito se muere sin el animal… el uno para el otro…

MARITA: Se va a tener que acostumbrar al de la calesita…

VICTORIO: No es lo mismo…

MARITA: No le va a quedar otra…

VICTORIO: Con el animal es un… es un cariño que uno tiene…

MARITA: (Lo mira a VICTORIO, luego grita hacia afuera) No te tires así Dieguito… ¿qué te dije? te caes y no te subís más, eh, de en serio te digo…

VICTORIO: (Divertido, se ríe mirando hacia afuera) A los golpes el chico, eh… a los golpes…

MARITA: Si claro, a los golpes, después la que tiene que andar en la salita como una loca soy yo…

VICTORIO: (Sonríe tiernamente mirando hacia afuera) Y bueno… bruto como el padre el chico…

MARITA: Si, seguro, porque cuidadosa como la madre lo dudo…

VICTORIO: (Pausa, se queda mirando hacia afuera) Lindo sería un día volver a salir los tres juntos… como saliamos antes Marita, en el gordini los tres apretados como pepino en frasco… ¿ vos te acordas? se nos quedaba y había que pecharlo, que empujarlo… y si llovía… uh, si llovía se armaba la de Dios es grande… embarrados hasta la nariz… los tres, vos, el chico y yo, hasta acá de barro… ¿vos te acordas de eso? (pausa breve, se queda pensativo) pero una vez que podamos estar juntos, como una familia, como… como éramos antes…

MARITA: (Gritando hacia afuera) Bajate Dieguito que enseguida nos vamos, eh…

VICTORIO: Otra vida el Rodas Marita… ya no es como antes, ahora es distinto… otra vida… el keko me dijo que ahora tienen casillas tipo familiares… grandes las casillas, baño incluido y todo… como será que pueden caber dos familias en una sola casilla, imaginate… para tres personas sobraría un montón de espacio… de… de lugar… (tanteando) por ejemplo para nosotros tres… andaría de primavera… sería ideal para… para…

MARITA: (Interrumpiéndolo de un grito hacia afuera) Ni se te ocurra agarrar ese palo Dieguito, eh…

VICTORIO: Para… para empezar de nuevo… un lugar para empezar de nuevo y…

MARITA: (Trata de evadir y se va hacia afuera) Me va a volver loca… deja ese palo te digo carajo…

VICTORIO: (Al ver que MARITA está afuera, levanta la voz para ser escuchado) Para tenerlo al Dieguito alguna vez… en una casilla como la gente digo… con… con calefacción y todo la casilla… (reaparece MARITA hecha una furia) con… con coso… con control remoto también…

MARITA: (Gritándole desde la puerta) Dejá ese animal en paz te dije… no lo jodas más que te va a dar una patada en la geta…

VICTORIO: (MARITA con medio cuerpo hacia afuera. VICTORIO levanta la voz otra vez para ser escuchado nuevamente) En vista tengo tres camas Marita, individuales las camas, para estar más cómodos, más… de pino las camas, eh, tipo marinera son viste, con… con respaldar y todo son las camas, eh…

MARITA: (Desde la puerta hecha una furia) Pero la puta que te parió Dieguito, eh… seguís así y nos vamos a la mierda…

VICTORIO: (Ya casi gritando) Y ojo que tengo ahorrado para los colchones y todo, eh… colchones altos digo, grandote, tipo somnier… bueno algo parecido, industria Japonesa los colchones pero… pero…

MARITA: (Mirando con bronca hacia afuera) No ves que te digo, otra vez pegándole al animal… me voy a la mierda Victorio… me vas a disculpar pero cuando empieza así no termina más…

VICTORIO: (Se para rápidamente) Para Marita… yo te… te…

MARITA: (Lo interrumpe, junta las cosas de la mesa) Además si no me voy ahora me va agarrar la tormenta a mitad de camino… otro día te traigo el chico más tiempo…

VICTORIO: Es que yo te quería decir que… que…

MARITA: (En la puerta) ¿Qué cosa Victorio? (VICTORIO se queda mudo mirándola. MARITA se impacienta) dale, apurate que nos va a agarrar la tormenta…

VICTORIO: (Ultima carta, la mira a los ojos) Que… que… que quiero que sepas que te amo Marita… (se la queda mirando un tiempo, luego) que seré todo lo tarado que vos quieras… pero que amar… yo te amo con todo el corazón… que ahora viviendo los tres juntos va a ser distinto… que solo no aguanto más… que… que una oportunidad así no se le puede negar a nadie… y… y menos tratándose de… menos tratándose de amor… (VICTORIO saca de una bolsa, un blanco y gastado vestido de novia) este es un regalo que yo… que yo te quería dar… quiero que te cases conmigo Marita… (MARITA lo mira sorprendida. VICOTRIO se lo ve ridículo con el vestido de novia sobre el pecho) casate conmigo y… y vámonos los tres juntos… borrón y cuenta nueva Marita… (pausa breve) es una ilusión Marita… una… yo hace tiempo que… (hace un remolino con el dedo en el aire) que me da vuelta el corazón así y… te lo quería decir Marita… me… (al ver que ella se lo queda mirando, no sabe como seguir) el vestido es de tú talle… había también color cremita… rosa claro había… pero… pero a mí me pareció que te… te… tengo también en el patio corona de novia, eh… (al ver que permanece callada) ¿no vas a… no vas a decir nada?

MARITA: (Pausa. MARITA se sienta) Victorio yo… yo no te dije nada pero… pero yo hace unos días que… que estoy saliendo con otra persona…

VICTORIO: (Queda duro con el vestido de novia sobre el pecho, reacciona tarde) Ah…

MARITA: (Pausa) En realidad… hace dos semanas que empezamos a… a salir… (pausa breve) el trabaja en el supermercado, se llama Raúl… a lo mejor lo… lo conoces… (VICTORIO en silencio) te lo pensaba decir pero… no se daba la oportunidad… no… (Pausa breve) Lo nuestro es cama afuera Victorio, eh… ni loca lo llevo para la casa de mamá… además recién nos estamos conociendo y… (pausa breve. VICTORIO sigue duro ridículamente con el vestido en el pecho) discúlpame que no te lo haya dicho antes…

VICTORIO: (Asiente con la cabeza, sonrisa forzada) Todo bien Marita…

MARITA: (Pausa breve) Es que hace poco que… que estamos saliendo… y por eso no…

VICTORIO: (La corta rápidamente) Está bien Marita… (pausa) cosas que pasan…

MARITA: (Pausa breve, se siente culposa) Si pero a lo mejor yo te lo tendría que haber dicho antes…

VICTORIO: (Trata de disimular el golpe) Por mí no te hagas ningún… ningún problema… no… (Pausa) después de todo cada uno tenía que… que armar su vida, así que…

MARITA: (Pausa breve, que siente pena por él) Yo, igualmente… voy a seguir viniendo siempre Victorio, eh… por eso no te hagas drama que… que yo voy a seguir viniendo igual, eh…

VICTORIO: (Conteniendo la emoción) No si… por mí no… (intentado distraer) te vas a olvidar el taper… te lo vas a dejar sobre la mesa… (MARITA agarra el taper, VICTORIO se da vuelta, se toca el ojo con la manga del vestido disimulando mal) esta alergia de porquería me va a… me va a dejar loco mira…

MARITA: (Que no lo quiere mirar) El tiempo que está muy cambiante…

VICTORIO: (Disimula la emoción) Si… tiempo loco este… (sonrisa forzada) el ojo mío después hecho un tomate…

(Pausa, los dos en silencio y pensativos)

MARITA: (Tratando de salir) Tenes todos los platos sucios Victorio… dejame que te los lave ahora…

VICTORIO: (Se va hasta donde está ella) No… no te molestes Marita… yo siempre los dejo para lavar a la noche…

MARITA: (Lava los platos sobre la mesa, en el fuenton) Te los lavo ahora en un segundo, no me cuesta nada…

VICTORIO: (Pausa breve, secándose el ojo con la manga del vestido) Si se quieren quedar a comer… en el horno tengo tortilla de papa, eh…

MARITA: (Mientras lava los platos) Nos vamos enseguida Victorio… mañana el Dieguito tiene escuela…

VICTORIO: (Pensativo) Ah, si… me… me olvidaba… la escuela…

MARITA: Otro día por ahí… nos quedamos a comer con más tiempo…

VICTORIO: (Asiente con la cabeza en silencio, pausa) Marita…

MARITA: (Que sigue lavando los platos) Eh…

VICTORIO: (Pausa breve, la mira a los ojos) ¿Lo… lo queres?

MARITA: (Pausa breve, la pregunta la incómoda) Recién nos estamos conociendo Victorio…

VICTORIO: (Queda pensativo un tiempo, mirando el piso. Luego mira hacia afuera) Me… me parece que se largó…

MARITA: (Mirando hacia afuera tambien) ¿El Dieguito donde está?

VICTORIO: (Asoma la cabeza por la puerta) Abajo del toldito con el poni… (sonrisa tristona) no lo quiere soltar por nada mundo al animal… se… se encariño demasiado se ve…

MARITA: (Mira hacia afuera preocupada) Mientras que no sea una tormenta eléctrica como la del otro día nomás…

VICTORIO: (Mirando hacia afuera) Garrotillo parece…

(Se quedan los dos mirando hacia afuera un tiempo)

MARITA: (Secándose las manos en un trapo) Sacate ese pantalón que te lo voy a coser Victorio, pero te lo traigo el jueves recién, eh… de paso le doy una lavadita que no le va a venir nada mal… (VICTORIO se va hasta la silla y queda sentado con el vestido en el pecho) la mancha de aceite se la saco con bicarbonato… y si no con limón tibio sale seguro… (encuentra una carta en el piso) ¿y esto qué es?

VICTORIO: (Que estaba en el aire) Eh…

MARITA: Una carta Victorio… (mirando de los dos lados) pero no dice de quien…

VICTORIO: (Agarra la carta con anciedad) Haber, dejame ver… (toma la carta y la mira) es del Rodas…

MARITA: Ah… pero que bueno, entonces te escribieron… (VICTORIO saca un papel arrugado y lee) ¿y? ¿qué dice?

VICTORIO: (Pausa, deja de leer, se queda con el papel en la mano) Nada, no… no dice nada…

MARITA: (Que se lo queda mirando) ¿Cómo no dice nada?

VICTORIO: (Pausa breve) Me la mandaron en blanco… resentido Tortosa lo que… lo que nunca más volví… el tipo seguro se resintió… por eso que no… (se corta, pausa breve) pero no me importa, eh… (pausa breve, se muestra fuerte) me voy a presentar al Aguilas Humanas que mierda… ya lo tenía pensado, eh… familia de trapecistas el Aguilas Humanas así que… me toman así con los ojos cerrados… más vale…

MARITA: (Tratando de reanimarlo) Ahí seguro que en ese circo te va ir bien…

VICTORIO: Si, seguro… me preparo un lindo numerito y… cuestión de probar suerte… cuestión de… persevera y triunfaras decía el filósofo, así que… además que si no voy de trapecista voy de payaso seguro… y de última de boletero voy que mierda…

MARITA: Seguro, más vale…

VICTORIO: Una carta que le mande a los Tachuelas y… ¿y sabes como me van a responder en una patada no? me… me tienen muy junado los Tachuelas a mí, me… me quieren… son como hermanos de sangre para mí… más vale…

MARITA: (Asiente con la cabeza, y mira hacia afuera, pausa prolongada) Está parando de llover…

VICTORIO: (Pausa breve, que se quedó mirando la carta pensativamente) Chaparrón pasajero… para un rato y después se larga de nuevo… (hace un bollo el papel y lo tira) y bueno, que va hacer… (Pausa, la mira a MARITA, luego le señala el cuello semi sonriente) todavía tenes la… la medallita que te regalé para el cumpleaños…

MARITA: ¿Qué medallita?

VICTORIO: La… la que tenes acá en el cuello…

MARITA: (Descubriendo la medallita en el cuello) Ah, si… hace un montón años que me la regalaste Victorio…

VICTORIO: (Pensativo, asiente con la cabeza) Eramos novios…

(Los dos en silencio, de fondo se oyen las gotas que caen sobre el techo de la casilla)

MARITA: (Agarra su cartera vieja y una bolsa negra) Bueno ahora si que nos vamos Victorio, si no aprovechamos ahora que está parando…

VICTORIO: (Se pone de pie rápidamente y deja el vestido sobre la silla) ¿Estás segura que no se quieren quedar a comer?

MARITA: (Guardando nerviosamente el taper en la cartera) Mamá nos espera en casa con la comida…

VICTORIO: Mira que tengo tortilla de sobra, eh… para tirar para arriba tengo tortilla…

MARITA: Mejor nos vamos antes que se largue de nuevo Victorio…

VICTORIO: Si esperas un cachito más… se pueden ir con el micro de las ocho Marita…

MARITA: Hoy es domingo Victorio, el de las ocho pasa como a las diez…

VICTORIO: (Asintiendo con la cabeza) Tenes razón… te… te llamo un remis entonce…

MARITA: (Agarra el pantalón y lo mete en una bolsita) No, no hace falta Victorio… nos vamos de una corridita y listo, eh… (semi sonrisa) una bolsa en la cabeza y…

VICTORIO: (Asiente con la cabeza, pausa breve, la mira) Lo que haga falta para el chico Marita, ya sabes… me pegas el grito, eh… ¿le anduvo bien el pulóver que le lleve el otro día?

MARITA: (Se va hasta la puerta) No era el talle de él pero… pero igual no importa… (Pegando un grito hacia afuera) deja ese animal que ya nos vamos Dieguito…

VICTORIO: (Queda mirando hacia afuera) Grandote está el Dieguito, eh… (MARITA saca un pantalón de la soga. VICTORIO casi emocionado) arriba del poni se lo ve más grande…

MARITA: (Pausa breve, con el pantalón en la mano) Las medias esas colgalas atrás en la parrilla de la heladera que se te van a secar más rápido ¿sabes?

VICTORIO: (Que sigue mirando hacia afuera) Todavía tengo la foto del Dieguito arriba del elefante… cuando le festejamo el añito en el Rodas… el otro día me estaba acordando de eso…

MARITA: (Pausa breve, resistiendo la emoción como puede, se va rápido hasta la puerta) Bueno, si no nos vamos ahora… nos agarra la lluvia a mitad de camino y ahí si que es peor…

VICTORIO: (Saca el mantel de la mesa) Llevate el mantel Marita… para cubrirse la cabeza digo…

MARITA: No Victorio, no hace falta, está parando…

VICTORIO: (Queda con el mantel en el pecho) ¿Seguro…? (MARITA mira hacia afuera, no responde) linda se está poniendo la… la planta de la moneda… ¿la… la viste?

MARITA: Si la ví, está muy linda… pero no le descuides el agua nomás…

VICTORIO: (Asiente con la cabeza, mira triste hacia afuera) Ahora la lluvia le va venir bien…

(Tiempo, los dos en silencio mirando la lluvia, de fondo las gotas en la chapa)

MARITA: (Como si no se pudiera ir) El jueves te traigo otro pedazo de pasta flora… y si tenes más ropas me la das, eh… yo te la lavo en casa en una patada… planchada te puedo traer el pantalón y la camisa… las medias también si queres… (Pausa breve) y tené cuidado con la estufa a querosén, eh… si larga mucho olor me avisas que yo tengo un brasero en la piecita que allá nadie usa… y no comas cosas vencidas Victorio… cuidate con lo que comes, eh… de en serio te digo…

VICTORIO: (Pensativo) Debes en cuando una latita de atún…

MARITA: (Sonrisa tristona) Una latita de atún… (Pausa larga, MARITA lo mira melancólica desde la puerta) bueno…

(De fondo ya se oye ¨Los sueños¨ por Astor Piazzolla en bandoneón solo)

VICTORIO: (Pausa, se miran, sacando otra vez una sonrisa tristona) La pasamos bien, eh… tomamos mate… comimo pasta flora… (mira hacia afuera) y el Dieguito se divirtió…

MARITA: (Asiente con la cabeza, contiene la emoción como puede) Si te hace mucho frío te pones las mantas que te traje el otro día… mira que no hay peor cosa que una gripe en esta época… y mal curada no te cuento… abrígate bien que… los bronquios tuyos después… y no salgas del baño con el pelo mojado, eh… mira que vos sos de andar así nomás, eh… de en serio te digo… y si subís a ese sauce cuidate el cuero por favor, no sea un día te caigas y… y… (pausa breve, se vuelven a mirar) bueno… nos vemos el jueves…

VICTORIO: (VICTORIO asiente con la cabeza, conteniendo la emoción) No… nos vemos Marita…

(MARITA se cubre la cabeza con una bolsa, los dos se vuelven a mirar, y finalmente ella sale en medio de la lluvia. VICTORIO queda mirando por la puerta hacia afuera, saluda con la mano como si se tratara de una larga despedida. Luego vuelve derrotado al interior de la casilla, deja el mantel tirado sobre el suelo, mira el vestido de novia que quedó sobre la silla, lo toma, mira hacia la puerta con el vestido en la mano, despues se sienta con el vestido sobre la falda, de tal manera, que el vestido, parece una suerte de bandoneon desilachado. Queda mirándolo un rato mientras pareciera dormirse sobre la silla. Después de un tiempo y casi sorpresivamente, MARITA, o la ilusión de ella, asoma por la puerta. Ambos se miran largamente, la imagen se congela por unos segundos, la lluvia y la música siguen de fondo, la luz baja suavemente produciendo el apagón final)


TELON FINAL

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